Menos es más: Cercano Comedor
Durante las décadas que lo conozco, el hermoso Parque México no ha sido sede de un establecimiento de comidas cuya comida está a la altura de la belleza del parque. Varios cafés se han ido y venido, un agradable restaurante italiano desapareció en una nube de misteriosa burocracia. Pero la comida sofisticada ha sido relegada a los callejones y santuarios interiores de la Condesa y es una pena.
Por lo tanto, es un regalo tener Cercano Comedor como opción. Es un lugar sin pretensiones, el espacio lleno de madera, ladrillo y luz, cuya comida es mejor que buena y cuya vista es un festín para los ojos.
La idea del Comedor nació con dos talentosos chefs jóvenes, Elsa Olmos (antes de Corazón de Tierra en Baja California) y César Vázquez del subestimado y recientemente cerrado Nexo, en Polanco. A los dos se les ocurrió la idea de un comedor relajado que ofrezca una variedad de platos seleccionados de múltiples nacionalidades (España y Francia son las piedras de toque), pero siempre arraigados en materia prima estacional. César, que actúa como chef ejecutivo, insiste en que "no queremos pertenecer a ninguna categoría, somos una especie de bistró, pero también hacemos lo que para nosotros es ‘confort food’.”
Elsa, que se especializa en postres pero que actua como chef de cuisine, está de acuerdo. "No quiero hacer comida tan desafiante, el tipo de yuxtaposición arriesgada que pueden volver loca a la gente. Así que nos atenemos a combinaciones simples y prestamos atención a la técnica."
La mayoría de los platos se reducen a unos pocos ingredientes, por lo que el desafío se convierte en equilibrarlos bien. Un simple sashimi del día en crema de aguachile y nori junta el concepto de un ceviche al estilo del Pacífico y algas japonesas suaves; la salsa nunca triunfa sobre el pescado. Adoro el estofado de pulpo y almejas con alubias, chorizo salsa verde. Este clásico cántabro se sirve, apropiadamente, en una pequeña cazuelita de barro; el pulpo es mantecoso, alubias blancas ‘al dente’, chorizo unciona para añadir umami y la salsa verde (la variedad del norte de España, es decir, aceite de oliva perfumado con ajo y perejil) lo reúne todo de la misma manera que la banda sonora de una película clásica se relaciona con el drama.
La línea entre entradas y platos principales se desenfoca: solo se ofrecen cuatro de cada categoría. La short rib tierna con una milhojas de papas con mantequilla es como la de una abuela francésa, y el filete hecho como un clásico de un bistrot Parísino. El pescado del día está perfectamente preparado: César ha demostrado ser el maestro de pescado y carne cocinado ‘a punto’. Se presenta anidado en una cama de verduras esmeraldas y un remolino de "vichyssoise", es decir, papas mantecosas y cremosas.
Y, por supuesto, no falto mencionar los postres, que van más allá de la categoría de "confort" y deslumbran con su bondad. La tarta tatin caramelizada ya se ha convertido en un postre " de destinación". Pero también me gusta el merengue lleno de fruta; es como comer una nube.
La carta de vinos, curada por Andrés Amor de Padella, es selecta y asequible.
Y lo mejor de todo, los precios son eminentemente accesibles; una comida puede ser adquirido por menos de $ 400.
Si bien los fallos técnicos, especialmente en el área de servicio, deben ser resueltos, esto es de esperar en esta etapa juvenil, veo a Comedor Cercano como un clásico del vecindario en ciernes.
Cercano Comedor
Avenida México 157, entre Michoacán y Teotihuacán, Condesa; See map
Teléfono 5564 6810.
Abierto de martes a sábado de 1:30 a 11 p.m., domingos de 1 a 6 p.m., cerrado los lunes
Comida - (1-10) 8
Ambiente - 8; música mientras ecléctica, puede rebotar en las paredes, prefiero una mesa de terazza con una vista
Precio - $ 300 - 500 pp